"El stand up me dio más confianza personal"

18.02.2013

En la escuela los maestros de Julio Blanco, gerente de Marketing de Aplicaciones de Oracle para Argentina, Paraguay, Uruguay y Bolivia, le pedían que pasase al frente pero no para dar lección sino para hacer una rutina de humor e imitaciones. Admirador de los hermanos Marx y Pepe Biondi, hoy este analista de sistemas e ingeniero industrial se dedica de manera profesional a la improvisación y al stand up comedy en clave de humor simple.
En su trabajo de día ejecuta distintas acciones de generación de demanda para las principales aplicaciones de software de Recursos Humanos, Marketing, Ventas, Finanzas. Tiene un posgrado en Marketing de la UCA, una especialización en Marketing de la Industria del Vino de UdeSA y otra de Negocios y Administración de Recursos Humanos en la Universidad Regiomontana de Monterrey, México. Además, ejerce diversas actividades académicas como profesor.

-¿Por qué eligió la improvisación?

-Los espectáculos de improvisación están relacionados con el humor. El error y lo inesperado generan risas. Estudié dos años con Carlos Arzulián y Oski Guzman y luego con unos amigos creamos un pequeño grupo de teatro para presentarnos en salas del under porteño. Llegamos a realizar funciones para 150 personas. Me gustó tanto la técnica que fui instructor por un tiempo.

-¿Cómo define a la sensación de improvisar en público? ¿Teme a los baches?

-En improvisación no se cuenta con vestuario alusivo, ni decorado, con lo cual uno debe hacerle ver al público todo lo necesario para que interprete la obra. Es un trabajo físico y mental muy importante. Por eso, no se le dice ensayo a la preparación (típico en el teatro clásico) sino entrenamiento. Uno sale preparado para que la creatividad brote segundo a segundo y es genial salir a escena con una simple idea y que esta crezca con el paso de la obra. Uno mismo se sorprende.
El riesgo, aunque el público no lo crea, está muy acotado. Justamente, el entrenamiento más importante es la consolidación del trabajo en equipo. Se sale sin red, preparado para que el bache mental suceda en cualquier momento pero sabe, y está seguro, que alguien del equipo va a salir a escena para salvarlo y que el público no note que se quedó sin ideas por unos segundos.

-¿Por qué se volcó al stand up comedy?

-Fue cuando decidimos disolver el grupo de improvisación. Quería seguir vinculado al humor y conocía algo de la técnica por distintos humoristas norteamericanos, pero en ese momento había sólo tres espectáculos de stand up en todo Buenos Aires. Estudié dos años en el Teatro El Farabute, que hoy ya no existe. Me hice traer textos de EE.EE. para comprender a fondo la técnica. Les recomiendo Stand Up Comedy: The Book, de Judy Carter.

-¿Qué le aporta a su trabajo cotidiano la improvisación y el stand up?

-La improvisación me aportó creatividad porque mi cabeza quedó preparada para buscar siempre soluciones a temas comunes. También, trabajo en equipo porque me dio la capacidad de confiar que siempre hay alguien en el equipo que va a cubrir mi bache y yo haré lo mismo por el resto. Y manejo de situación porque las técnicas de improvisación teatral ayudan a leer la cara, los gestos, los movimientos de los compañeros para anticiparte y complementar la obra, y esto es muy útil para conocer mejor a las personas en el trabajo y así manejar distintas situaciones.
El stand up comedy aportó mucho en cuanto a la confianza personal y al estar preparado para dar una presentación WOW. Podemos contar con el mejor Power Point y el mejor video, pero si no estamos preparados física y mentalmente para dar la mejor presentación vamos a fracasar. Y muchas veces, en el mundo laboral y la vida, tenemos sólo una oportunidad para lograr lo que queremos y tenemos que estar preparados para no dejar pasar esa oportunidad.

-¿Aconseja estas técnicas en el coaching de líderes?

-Recomiendo ciento por ciento la improvisación teatral. Es para todos. En Europa se utiliza mucho estas técnicas para capacitar empleados, sea para integración y que trabajen mejor en equipo o para generar nuevas ideas en un proyecto. La técnica de stand up comedy creo que no es para todos pero sí para niveles gerenciales que necesitan mejorar su interacción en público.